Cuando hablamos de alimentación depurativa no significa que tengamos que hacer nada extremo que implique hacer ayunos o pasar hambre.
Significa utilizar alimentos que ya de por sí son depurativos en nuestros platos diarios y que nos pueden venir muy bien para eliminar los excesos utilizándolos de forma habitual. Estos alimentos son:
– Verduras que tienen propiedades depurativas como el apio, el puerro, hinojo, endivias, espárragos, remolacha y las alcachofas.
– Verduras de hoja verde, ricas en fibra y magnesio, tales como el brócoli, col verde, puerro, cocinadas muy ligeramente.
– Setas y champiñones.
– Nabos, rabanitos, tanto en ensalada, como en cremas o escaldados.
– Condimentar las comidas con hierbas aromáticas frescas tal como perejil, albahaca, menta, etc.
– Utilizar habitualmente jengibre fresco, especias y ajo.
Podemos utilizar estos alimentos para ensaladas, batidos, cremas o incluirlos dentro de los platos que comemos habitualmente.
Una opción muy interesante es empezar la mañana con un batido depurativo de verduras, y en la cena una crema calentita que nos puede ayudar a limpiar y relajarnos en la noche, ya que cenar ligero nos prepara para una mejor calidad de sueño.
¡Importante! Recordad que de nada sirve que comamos alimentos depurativos si no reducimos o evitamos comer alimentos procesados, llenos de aditivos alimentarios y que intoxican nuestro organismo.