Ingredientes
- 2 tazas de garbanzos cocidos
- 2 cebollas medianas cortadas a cubitos
- 2 zanahorias cortadas a cubitos
- 1 boniato mediano cortado a trozos
- 1 tira de alga wakame
- aceite de oliva
- sal marina
- 1 c.s. de cúrcuma
- 1 c.s. de tomillo
- perejil fresco picado
- 1 c.p. genmai miso (opcional)
Comparte esta receta:
A veces en consulta me dicen: “¿Cómo es posible que coma más que antes y pierda más peso que nunca?”. Fácil, si comes alimentos más nutritivos le estás dando al cuerpo lo que necesita y deja de pedirnos lo que no le hace falta.
La contundencia de la legumbre, su poder saciante y su dulzor nos dejará una sensación de bienestar y calor interno increíbles. Te garantizo que después de comer este plato no tendrás ganas de picotear en toda la tarde.
Esta receta es un reflejo de que la cocina puede ser fácil y rápida además de nutritiva y deliciosa.
Preparación
- Saltear la cebolla con una pizca de sal marina durante unos 10-12 minutos, sin tapa y a fuego medio.
- Añadir la zanahoria, el boniato, el tomillo, la cúrcuma, el alga wakame a trocitos y el agua que cubra la mitad del volumen de los ingredientes.
- Añadir los garbanzos ya cocidas y poner una pizca de sal.
- Llevar a ebullición y dejar que se cueza todo durante unos 30 minutos.
- Mezclar el miso diluido con un poco de agua o caldo y cocer 1 minuto más, sin que llegue a hervir. Servir con el perejil picado.
Suscríbete
a mi Newsletter
para recibir mi e-book
con recetas ¡Gratis!
